Padres opinan sobre la tragedia de Perry
/Lorena López Altamirano
editor@laprensaiowa.com
Seis días han pasado desde que el estudiante de secundaria Dylan Butler de 17 años, mató a balazos a Ahmir Jolliff, un niñito de 11 años y del sexto grado de primaria, que junto a otros estudiantes se encontraba en la escuela secundaria a horas tempranas del 4 de enero, para tomar desayuno del programa escolar que la escuela ofrece a los estudiantes.
Dylan también hirió a siete personas más, entre los que se encuentra el director de la escuela de secundaria de Perry Dan Marburger, “que trató de persuadir al muchacho [Dylan] para que abandonara el edificio de la escuela, al mismo tiempo que trataba de proteger a los niños parándose enfrente del muchacho,” dijo a este medio Juan Meraz que se según él se encontraba en la escuela a la hora del desayuno de los estudiantes. “soy un voluntario del programa de comida de los niños.”
Algunos habitantes de Perry describieron el momento como “una pesadilla, la sirena de las ambulancias y los carros de la policía no cesaban el sonido de sus sirenas, para abrirse paso, al mismo tiempo que anunciaban el terror que los estudiantes de la escuela estaban pasando,” expresó con voz temblorosa una madre latina trabajadora de Tyson que prefirió ocultar su nombre. “Estoy acostumbrada a escuchar este tipo de noticias [tiroteo en la escuela] en la televisión, porque me parece que estas cosas solo pasan en las ciudades grandes, nunca me imaginé que iba a suceder en este pueblito.”
Otra madre latina, es Laura Hernández madre de tres varones, entre los que se encuentra Samuel. “Cuando lleve a Samuel a la escuela, me encontré con muchos carros policías en la entrada de la escuela, y me dijeron que me retirara del lugar tan pronto fuera posible, deje a mi hijo en la casa y me fui al trabajo. Una hora más tarde me encontraba nerviosa y pensé que debería estar en mi casa con mis hijos, porque si yo me encontraba nerviosa, ellos podrían estar peor que yo.” Dijo la joven madre. “Con esta tragedia que nos ha tocado tan cerca a todos, me pongo a pensar, que muchas veces nosotros como padres de familia le damos más prioridad a nuestro trabajos que a nuestros hijos, y muchas veces tienen que pasar cosas como estas para reflexionar que nuestra máxima responsabilidad debe de estar en saber lo que nuestros hijos están haciendo, en lo que corre por sus mentes, y no dejarlos bajo la influencia de las redes social, porque hoy en día es eso lo que está educando a nuestros hijos, y no nosotros como padres.”
Otro padre de familia que no quiso ser identificado, dijo “Tal parece que ya nos estamos acostumbrando a ver este tipo de matanzas en las escuelas, así como nos estamos acostumbrando a decir ‘estoy orando por las victimas y por la familia del joven que mató al estudiante e hirió a los otros. Todo esto es muy triste, pero la verdad de las cosas es que aquí no va a cambiar nada, y las cosas van a seguir igual o peor; porque nadie, especialmente el gobierno no quiere hacer nada al respecto, más que visitar, y dar sus condolencias a las partes afectadas.”
Cabe mencionar que el estudiante tirador publicó un video en sus redes sociales antes de perpetuar el tiroteo, donde dijo que ‘estaba listo para lo que viniera.’ También comentó que se encontraba nervioso, y que no podía activar sus armas porque un “n--” se encontraba en el baño en ese momento.
Dylan que cursaba el 11avo grado usó un rifle de cazar y una pistola, para matar al estudiante y herir a otras seis personas, antes de dispararse a sí mismo la madrugada del jueves, 4 de enero, informaron los agentes de la ley.
Unas 500 personas asistieron a una vigilia en Wiese Park de Perry, donde encendieron velas poco después de las 5 de la tarde del mismo día de la tragedia donde pastores de diferentes religiones, padres de familia y estudiantes se unieron por medio del sentimiento de la solidaridad, para orar y tratar de mitigar la tristeza de la pequeña comunidad de apenas 8,000 habitantes.
A raíz del tiroteo en la escuela de Perry la semana pasada, Mike Pardun, superintendente de las Escuelas Comunitarias de Denison y la Escuela Comunitaria de Schleswig, dijo lo siguiente:
“Seguimos profundamente conmocionados y entristecidos por los acontecimientos ocurridos en Perry. La seguridad de nuestros estudiantes y personal es nuestra principal prioridad.
“Revisamos constantemente nuestras medidas de seguridad para asegurarnos de que estamos haciendo todo lo posible para proteger a nuestros estudiantes y personal. Instamos a todos a que hablen si ven o escuchan algo que pueda representar una amenaza potencial a la seguridad escolar.
“Queremos que nuestras familias sepan que estamos de forma regular en contacto con nuestras autoridades locales y que estamos trabajando con los servicios de emergencia de nuestro condado para evaluar nuestros procesos y procedimientos.
“Como dije, la seguridad de nuestros estudiantes, profesores y personal es nuestra prioridad principal. Seguimos teniendo en nuestros pensamientos a la escuela y la comunidad de Perry.”
Translation
Parents weigh in on Perry tragedy
Lorena López Altamirano
editor@laprensaiowa.com
Six days have passed since 17-year-old high school student Dylan Butler shot and killed Ahmir Jolliff, an 11-year-old sixth-grade boy, who along with other students was at the high school in the early hours of the morning. January 4, to eat breakfast from the school program that the school offers to students.
Dylan also injured seven more people, including Perry High School Principal Dan Marburger, “who tried to persuade the boy [Dylan] to leave the school building, at the same time trying to protect the children by standing in front of the boy,” Juan Meraz told this medium, who according to him was at school at the students' breakfast time. “I am a volunteer for the children's food program.”
Some residents of Perry described the moment as “a nightmare, the siren of the ambulances and the police cars did not stop the sound of their sirens, to make way, at the same time they announced the terror that the school students were going through.” ,” said a working Latina mother from Tyson who preferred to hide her name with a trembling voice. “I'm used to hearing this type of news [school shooting] on television, because it seems to me that these things only happen in big cities, I never imagined it would happen in this little town.”
Another Latina mother is Laura Hernández, mother of three boys, among whom is Samuel. “When I took Samuel to school, I found many police cars at the school entrance, and they told me to leave the place as soon as possible, leave my son at home and go to work. An hour later I was nervous and I thought I should be at home with my children, because if I was nervous, they could be worse than me.” The young mother said. "With this tragedy that has touched us all so closely, I start to think that many times we as parents give more priority to our jobs than to our children, and many times things like this have to happen to reflect that Our maximum responsibility should be to know what our children are doing, what is running through their minds, and not leave them under the influence of social networks, because today that is what is educating our children, and not us as parents.”
Another parent, who did not want to be identified, said, “It seems that we are already getting used to seeing these types of killings in schools, just as we are getting used to saying 'I am praying for the victims and for the family of the young man who killed.' the student and injured the others. All of this is very sad, but the truth of the matter is that nothing is going to change here, and things are going to remain the same or worse; because no one, especially the government, wants to do anything about it, other than visit, and give their condolences to the affected parties.”
It is worth mentioning that the student shooter published a video on his social networks before perpetuating the shooting, where he said that 'he was ready for whatever came.' He also commented that he was nervous, and that he could not activate his weapons because a “n- -” was in the bathroom at that time.
Dylan, an 11th grader, used a hunting rifle and a pistol to kill the student and wound six other people before turning the gun on himself early Thursday, Jan. 4, law enforcement officials said.
About 500 people attended a vigil in Wiese Park in Perry, where they lit candles shortly after 5 p.m. on the same day of the tragedy where pastors of different religions, parents and students came together through the feeling of solidarity , to pray and try to alleviate the sadness of the small community of barely 8,000 inhabitants.
In the wake of the Perry school shooting last week, Mike Pardun, superintendent of Denison Community Schools and Schleswig Community School, had this to say:
“We remain deeply shocked and saddened by the events that occurred in Perry. The safety of our students and staff is our top priority.
“We constantly review our safety measures to ensure we are doing everything possible to protect our students and staff. We urge everyone to speak up if they see or hear anything that could pose a potential threat to school safety.
“We want our families to know that we are regularly in contact with our local authorities and that we are working with our county emergency services to evaluate our processes and procedures.
“As I said, the safety of our students, faculty and staff is our top priority. “We continue to keep the Perry school and community in our thoughts.”